Mas allá del Jet-Lag

No Jet-Lag es un remedio homeopático único que se autoproclama como la salvación para aquellos sufridos hombres de negocios, turistas empedernidos, deportistas de élite, y personal aéreo que sufren del conocidísimo Jet-Lag. Este fenómeno, también conocido como Jet lag o jetlag, es una condición fisiológica que es consecuencia de alteraciones en el funcionamiento de nuestro ritmo circadiano o reloj biológico interno. La perfecta sincronización entre nuestro reloj interno y los ciclos de luz y oscuridad (día y noche) permite a nuestro cerebro controlar funciones biológicas tan importantes como dormir y comer. La publicidad continúa así: “No Jet-Lag es un producto único, especialmente formulado y rigurosamente testeado para aliviar el jet-Lag, que incluso puede ser usado conjuntamente con otro tipo de medicación”. Para finalizar destaca:” mascando una tableta cada dos horas durante el vuelo y una tableta durante el aterrizaje se pueden evitar los desagradables efectos del Jet-Lag. 32 tabletas, suficiente para 50 horas de viaje. Su precio, $14.74 US. (http://www.nojetlag.com/)

Intrigado por “la formula secreta y rigurosamente testeada de este milagro de la homeopatía” y que por supuesto, no develan ni mencionan, me dispuse a averiguar más sobre este tema y creo haber descubierto algún indicio de cual puede ser el “ingrediente milagroso”. Su nombre, Melatonina. La melatonina es una hormona que se sintetiza en la glándula pineal o epifisis que esta ubicada en el diencéfalo (parte del encéfalo situado en el cerebro medio) y que regula los ciclos de vigilia y sueño y cuya síntesis disminuye con la edad. La somnolencia y el sueño ocurren cuando los niveles de melatonia aumentan, lo cual normalmente ocurre durante el atardecer y la noche y disminuye durante el día. El Jet-Lag se produce cuando nuestro día normal es alargado o acortado por vuelos rápidos a través de varios husos horarios Este-Oeste. Si la melatonia es tomada en la noche (en el nuevo huso horario) rápidamente el reloj circadiano se reseteará y de manera casi inmediata se aliviará (o prevendrá) los síntomas del Jet-Lag. (Detalles en Arendt et al,1986. Brit. Med. Journal. 292, 1170). Sin embargo, hay un efecto secundario que el mágico producto homeopático no menciona y es que “altas dosis de esta hormona tiene un efecto cancerígeno”. Bueno, no lo menciona en la página web que lo publicita, lo cual suena lógico si lo que quieres es vender un producto. Lo más probable y lógico, sería encontrar un papelito con las especificaciones del producto y posibles contraindicaciones en las cuales eufemísticamente debería advertir que “sobredosis de este producto pueden tener efectos adversos para la salud”.

Como es costumbre en este blog, mi intención no es criticar al producto en cuestión por no habernos contado la historia completa pues probablemente lo hagan a su manera, ni tampoco es desanimar a aquellos que veían en este producto la solución a los molestos efectos secundarios de volar más rápido que el sonido. Mi intención tampoco es mostrar lo listo que es nuestro cerebro para detectar que algo no anda bien y dar rápidamente solución a la incongruencia pues es sabido que esa masa gris requiere de cientos años mas de estudios para saber cuándo, cómo y por qué toma las decisiones que toma. Mi intención es mostrar que una simple palabra, “Jet-Lag”, te puede conectar a un campo infinito de información que fácilmente puede derivarte a otro y ese otro a otro aún más interesante. Poder comunicarnos sin vernos, poder expresar nuestras ideas sin ser desplazados o marginados, ser iguales o ser uno mas, es lo que me gusta de Internet. Suerte la nuestra de poder disfrutar de este mundo virtual y poder saciar nuestra curiosidad y dejar atrás la ignorancia con solo un “click”. Suerte la mía de poder expresar mis ideas y compartir mis inquietudes y/o conocimientos en este blog del cual me siento partícipe, digamos, por coincidencia generacional.. Soda y La Valija Diplomática, la chasquilla escarmenada con kilo y medio de gomina y los ultra cool pantalones amasados son algo con los que conviví y disfruté, algo que al parecer, la mayoría de los “colaboradores de este blog” también han experimentado.

Desde hoy y siempre que mi reloj circadiano y los niveles de Melanina endógena lo permitan, aportaré con información que me parezca interesante, entretenida o digna de compartir.

Saludos cordiales
Inemot