jueves, 30 de agosto de 2007

RIP


Desde hace un tiempo vengo hablando -sin concretar nada, como es la costumbre- sobre hacerle animitas a las casas que los edificios han hacho desaparecer. Animitas, para los que no viven en esta parte del universo, son unos muy pequeños santuarios o capillas que colocan los deudos en los lugares donde han muerto sus familiares. Esto generalmente ocurre a la orilla de calles y carreteras, producto de muertes por accidentes. Más información aquí, aquí, y algunas fotos en Google.

La de la foto es la calle Los Jesuítas, mirando al oriente hacia la calle Julio Prado. Salvo el edificio que se aprecia en la vereda izquierda, es una bonita cuadra de la comuna de Providencia en Santiago. En el pasado, la calle solía continuar una cuadra más allá de Julio Prado y terminar su existencia en la calle siguiente, José Manuel Infante, como al día de hoy aún muestra este mapa. Pero esto ya no será así, porque donde debería estar la última cuadra de Los Jesuítas ahora hay un inmenso agujero. No, no cayó un meteorito: están construyendo un edificio, y así la vista que se puede apreciar en la foto, aún más bonita en primavera y verano, desaparecerá ad infinitum.

Pues bien, la idea consistía en poner animitas que recordaran esas casas y diversos lugares que ese engendro que todo lo justifica llamado progreso se ha ido llevando por delante. Que se yo, me imagino pequeñas grutas de greda con una foto de la casa y una vela, o cualquier otra instalación que incluya algún testimonio de lo que el progreso se llevó. Así que con esto empiezo. Ya tengo una foto, y cuando esté listo el edificio la pondré en su animita. Nadie dijo que era una idea de corto plazo.

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